La Pirámide de Cholula está oculta bajo una montaña, sobre la cima se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios de Puebla, en México.
Los conquistadores, liderados por Hernán Cortés en el siglo XVI, se establecieron en la ciudad de Cholula (que por aquel entonces era una ciudad sagrada azteca) la cual hoy forma parte de la región de Puebla. Los españoles que llegaron a ese territorio en México colmaron todo con sus edificios.
Los españoles de entonces consideraron que la fundación de la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios, sobre lo que creían que era una colina grande, significaba un acto de conquista cristiana, pero no repararon en los cimientos donde edificaban: la Gran Pirámide de Cholula.
Esta obra arquitectónica, que quedó escondida, es considerada la pirámide más grande del mundo con una medidas de 400 metros de ancho y 65 metros de alto, siendo así superior a la Gran Pirámide de Guiza, en Egipto.
La pirámide fue encontrada durante la construcción de un manicomio en la zona en 1910, según señala la ‘BBC’. La obra comenzó a edificarse en el año 300 a.C. y, aunque no se sabe quién fue su autor, se plantea que fue una obra «multiétnica» en la que hubo una «gran participación de la migración», según declara el arqueólogo de la Universidad de Boston David Carballo y recoge el portal web ‘RT’.
«No es una pirámide, es una matrioska», ha señalado ‘BBC’, el tradicional juego ruso de muñecas dentro de otras muñecas huecas. La pirámide consta de, al menos, otras seis construcciones supeditadas unas a otras, lo que deja intuir que creció por etapas según pasaron civilizaciones.
Las teorías que han existido acerca de la pirámide llegaron a plantear que los propios nativos, ante la llegada de conquistadores, camuflaron la obra con material del suelo. Diversos investigadores también suponen que podría haber sido oculta de manera accidental al ser sus ladrillos una mezcla de barro y paja horneados al sol.
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