Los avances sobre la Inteligencia Artificial a lo largo del año han sido increíbles. Hasta hemos asistido al primer nombramiento de un “androide” convertido en ciudadano oficial. Pero, ¿sería éste el momento idóneo para replantearnos la teoría de Isaac Asimov? ¿Cómo les enseñaremos a tener una ética moralmente aceptable?
Es normal que tantos científicos y expertos estén preocupados con lo rápido que nos estamos adentrando en este nuevo salto cualitativo de la humanidad. Si aún no somos capaces de controlar nuestras emociones “humanas”, ni hemos encontrado el lugar donde habita la consciencia, ¿cómo seremos capaces de establecer unos patrones morales y éticos en estas tecnologías autónomas? Lo cierto es que el futuro ha llegado antes de lo que quizás estaba previsto, y las prisas por establecer un control sobre esta tecnología es evidente.
Científicos de la Universidad de Osaka han creado un nuevo sistema que aprueba a la Inteligencia Artificial a aprender vocabulario en un diálogo establecido mediante confirmación tácita. Este androide se llama “Sophie” y sorprende lo rápido que aprende. Su aspecto es más bien tétrico, pues se puede apreciar todo el complejo circuito que porta esta máquina. Además, sus rasgos faciales son muy similares a los humanos, dando aún más pavor si cabe.
Esta es Sophie, la Robot que dijo que destruiría a los humanos y que quiere formar una familia. Ella es también el primer robot en recibir la ciudadanía de un país.
Muchos robots, cyborgs y aplicaciones de síntesis de voz se han establecido en nuestro día a día durante los últimos años; no obstante, en estos métodos, los ordenadores reconocen las preguntas y responden según lo dispuesto con antelación. Pero como los expertos quieren que Sophie sea aún más inteligente, necesitan que la inteligencia artificial sea capaz de tener conversaciones complicadas con personas.
Esta es Sophie, la Robot que dijo que destruiría a los humanos y que quiere formar una familia. Ella es también el primer robot en recibir la ciudadanía de un país.
Otra forma de aprender que tienen estos dispositivos inteligentes es haciendo preguntas simples y constantes. No obstante, aún es poco “atractiva” su programación para la venta al público, puesto que no está programada para hacer preguntas que resulten interesantes que inciten a la interacción con la misma. Pero dado el sorprendente avance tecnológico y lo cerca que estamos de tener una “Sophie” en nuestros hogares, este último inconveniente seguro será solventado muy pronto.
El equipo de científicos que dirige el profesor “Komatani”, creó un método de contestación implícita, mediante el cual el “androide” adquiere nuevos niveles de conocimiento a través de una nueva palabra desconocida para él, que escucharía mientras entabla una conversación con cualquier persona.
El fin de esta nueva propuesta metódica es conseguir que la inteligencia artificial sea capaz de predecir la condición de una palabra desconocida durante una conversación, hacer solicitudes de certificación implícita al consumidor y que éste pueda responder a estas consultas. Así, el sistema inteligente aprende y adquiere nueva información durante un diálogo, consiguiendo así un sistema autónomo e inteligente.
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Ejemplo de confirmación implícita (crédito: Universidad de Osaka)
En este procedimiento, el ‘programa’ resuelve si la predicción es correcta o no esgrimiendo la respuesta del usuario durante cada solicitud, utilizando técnicas de aprendizaje instintivo. «El cometido de la decisión de este sistema mejoró tomando en consideración los resultados de clasificación obtenidos de los diálogos con otros usuarios», dijeron los miembros del equipo.
Además, los expertos afirman que los “Chatbots” más populares hablarán con cualquiera de la misma manera que lo hacemos entre nosotros. Y mientras que estos sistemas de inteligencia artificial se vayan popularizando, seremos nosotros quienes enseñaremos a estas máquinas a hablar mediante las conversaciones que mantendremos con ellas en nuestro día a día como ya lo hacemos en el presente con nuestro teléfono móvil mediante Google, productos de ubicación a tiempo real, etc.
Los resultados de la investigación de este equipo son un nuevo enfoque hacia la realización de sistemas de comunicación de voz en los que un sistema puede volverse más inteligente a través de los usuarios y alcanzar otros niveles desarrollo de sistemas de diálogo con características adaptadas y personificadas a cada usuario.
Esta investigación, llamada “Adquisición léxica a través de confirmaciones implícitas sobre múltiples diálogos”, se presentó el 17 de agosto, en la 18ª edición del SIGDIAL 2017. Estaremos muy pendientes de nuevas presentaciones del proyecto.
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