El periodista de investigación sueco Bechir Rabani muere en extrañas condiciones. Estuvo infiltrado en los grupos de terrorismo callejero de extrema izquierda autodenominados “Antifas” y acababa de anunciar que iba a desvelar cómo el periodista Robert Aschberg trabajaba a las órdenes de Soros y cuáles eran sus planes inmediatos para desestabilizar en Europa.
El popular y televisivo Robert Aschberg (del que Bechir Rabani investigaba su trabajo para George Soros en el momento de su muerte) es nieto de Olof Aschberg, un banquero judío que financió a los bolcheviques en 1917, quienes como agradecimiento le nombraron director del banco internacional soviético Ruskombank.
Este alopécico «progre» aficionado al caviar y los gustos refinados, maoísta en su juventud, lanzó un nuevo programa de televisión llamado «Troll Hunters», donde él personalmente visita en su casa a suecos que escriben en internet contra la inmigración.
“Cuando Aschberg los encuentra deben ponerse frente a él para explicarle por qué se comportan como lo hacen y rendir cuentas”,”¡El tiempo en que eráis libres de difundir el odio ha pasado. La caza ha comenzado!”, dice el demagogo Robert Aschberg, versión sueca del español Risto Mejide.
En cualquier Estado de Derecho no puedes ir al domicilio de alguien, cámara de televisión en mano, armado con un bate de beisbol y acompañado de un multitudinario grupo de «pacíficos activistas en contra de la islamofobia», y montar a un ciudadano anónimo una manifestación delante de su domiclio sólo por haber mostrado su opinión en contra de la inmigración islámica en las redes sociales…
Pero al dictado de Soros y con un trabajo excelentemente remunerado por el multimillonario judío, Aschberg ha conseguido que la tranquila e idílica Suecia diste ahora mucho de ser un Estado de Derecho.
Bechir Rabani solo tenía 33 años y practicaba un periodismo independiente e insumiso con los más poderosos, un ejemplo y una rara avis en un mundo en el que los periodistas se prostituyen con extraordinaria facilidad:
España, acaso, sea el mejor ejemplo de una profesión vendida. Más de un 90 por cien de los principales comunicadores españoles (directores de periódico, conductores de programas de televisión y radio, contertulios habituales y columnistas de prensa) están al servicio de intereses de grandes grupos financieros que pagan muy bien su falta de escrúpulos para falsear la verdad y manipular a la opinión pública.
Según la policía, el valiente periodista Bechir Rabani fue encontrado muerto en su domicilio en “circunstancias sospechosas”. Seguro que todo quedará en una sobredosis de barbitúricos, un suicidio o una muerte por causas naturales.
Pero quienes conocemos que Rabani había prometido desvelar la labor en la sombra del multimillonario sionista que marca la agenda política europea y muy especialmente la española, no permitiremos que su muerte permanezca en el olvido ni que sus investigaciones hayan muerto con él.
Las garras de George Soros llegan a todas partes. La ambición y la maldad del multimillonario judío no conocen límites. Pero la muerte de Bechir Rabani no será en vano. El medio La Tribuna de España se propone informar con nombres y apellidos de qué periodistas trabajan al servicio de Soros.
Y tu vas a poder leerlo en este medio que no teme a nada ni a nadie.. Mira el siguiente video y déjanos tu comentario más abajo.
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