Muchas civilizaciones antiguas creían en la reencarnación, por ello preparaban a los muertos para el «viaje». A pesar de que siempre se pensó en ello como simple mitología, expertos encontraron evidencia de que es real.
Actualmente, al menos el 51% de la población mundial cree que, de alguna forma, existe vida después de la muerte. Además, al menos el 7% cree que somos alguien que ya reencarnó. Eso hace que la creencia en la reencarnación sea prácticamente un hecho.
Cuando se comprende este suceso como un proceso evolutivo de la energía del alma se llega a la conclusión que ciertas personas experimentaron diferentes cosas en vidas pasadas. Estas mismas se reflejan en el espíritu.
Evidencias de la reencarnación
La mayoría de los aspectos personales, experiencias y capacidades de la vida actual son reflejos de lo que ya se vivió. Mientras más evoluciona la persona, mejor capacitada está para ciertas vivencias y obtiene mayor experiencia espiritual.
Cada persona, en mayor o menor medida ha pasado por este proceso, experimentando ciertos eventos.
Uno de éstos son los sueños «extraños», normalmente continuos, que en un principio pareciera no tener sentido. Sin embargo, podrían tratarse de reflejos de experiencias en vidas pasadas. Como alguna fobia, miedo o problemas.
Esa es la razón de que muchos aseguran conocer algún lugar o a alguien sin haberlo visto nunca.
La intuición es la capacidad de mantener equilibrada la mente consciente e inconsciente. Así, cada persona puede aprovechar la sabiduría primordial y conocimiento innato. Además, se cree que cuando evoluciona el alma, se está más cerca de volver a la «fuente» de donde proviene la misma.
Otra situación que todos hemos vivido, es la sensación de déjà vu. El sentimiento de estar viviendo algo que ya pasó, el cual nace espontáneamente, desencadenado por algún sentido.
Expertos de la comunidad científica aseguran que esta sensación es una disonancia neurológica. Sin embargo, investigadores alternativos sugieren que podría tratarse del reflejo de otras dimensiones.
Saber eventos futuros o pasados
La precognición es la capacidad de obtener información de sucesos que pasarán en el futuro. Este proceso puede ocurrir a través de visiones, sensaciones, sentimientos o sueños.
Si bien este es un hecho cuasi científico, la experiencia de la precognición podría relacionarse con la maduración del alma. Experiencia que se ha ganado durante la reencarnación.
Pero al contrario de la precognición, está la retrocognición. Cuando alguien puede saber información que no está disponible sobre eventos pasados. Estos podrían relacionarse con la propia vida o algún momento del pasado.
Obviamente, la retrocognición es complicada de confirmar, pero para aquellos que la experimentan, es un signo de reencarnación.
En relación a esto, hay muchas personas que sienten que tienen más o menor edad de la que tienen realmente. Un claro reflejo asociado a la «Edad del Alma».
Y por último, los que han reencarnado, tienen recuerdos y vivencias de sucesos en otras vidas, las cuales dejan rastros en las actuales. Por ejemplo, existen muchas personas que tienen miedo al mar, sin nunca haber ido a una playa. O personas con miedo a volar, a pesar de que nunca se han subido a un avión.
Son muchos aspectos que los expertos han asociado a la existencia de la reencarnación. Obviamente, aún existen personas escépticas ante este hecho, pero las evidencias son casi irrefutables…
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